Este apartamento de 75 m² es uno de los dos que se obtuvieron al
dividir una antigua pista de baile, y crear así dos bonitas
casas de alquiler estacional. Clásico, elegante y a la vez atemporal,
es una joyita ubicada en el corazón de París de la que nos han enamorado
muchas cosas, pero sobretodo el uso del color para zonificar los
espacios y definir bien la función de cada rincón de la casa.
Fijaros en sus paredes pintadas que no llegan al techo (así se crea
el efecto de bajarlas un poco), la genialidad de pintar el techo de la
cocina (abierta al salón y conectada a través de una gran mesa a medida) del
mismo color que el mobiliario. Color que se prolonga también hacia el
pasillo. Sus luminarias a juego con los grifos efecto dorado ¿quién dice
ahora que no se llevan? O la simpleza de una decoración básica pero muy
estudiada.
Es complicado saber si se trata del Classic Blue (ya sabéis el color del año 2020 según Pantone), pero si no lo es, mucho se le parece. Un color potente, atrevido y con mucha fuerza.
Los que tienen dormitorios pequeños pueden inspirarse en este
pintado en tono salmón (también con la pared semi pintada) o ese gran
armario a medida detrás del cabecero. Y en cuanto al baño, ¿ya os habíamos
dicho que este es un clásico renovado? El mármol blanco y negro le da
tanto carácter que es imposible no enamorarse de un espacio así. El
mobiliario a medida hace su función: un 10 en estética y otro en capacidad
de almacenaje.
Os dejamos las inspiradoras fotos...Si os gusta y tenéis en mente viajar a
París (cuando se pueda y sea seguro) tenéis que saber que este apartamento
está en
Airbnb. ¡Tomar buena nota (debe estar súper solicitado)!
¿Qué os ha parecido? ¿Os inspira esta forma de pintar las paredes?
/Fotografías y autoría del proyecto:
Gram Architecture&Design. /
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Maribel ♡